En los días previos al año nuevo, he observado que muchas personas comentaban acerca de las ganas de despedir un año cargado de negatividad

Repetían una y otra vez todo lo malo del 2013 e incluso brindaban por la llegada del año quejándose del anterior

Todos hemos tenido algún año en el que nos ha pasado de todo a la vez pero, seguro que también ha habido cosas buenas. ¿Por qué todo lo malo tiene más peso sobre lo bueno?

Si ha sido un mal año, es normal que se quiera cerrar una puerta para abrir otra. No obstante, no conseguiremos abrirla si no paramos de recordar lo malo que ha sido el año que se nos acaba de ir

¿Qué tal si recordamos todos esos momentos inolvidables que hemos tenido la oportunidad de vivir? 

Solo tener presente lo malo, hará que no soltemos lastres y no dejaremos espacio para que lo bueno que está por venir entre en nuestra vida

Recuerda utilizar bien tu lenguaje, habla sobre las oportunidades que te esperan y no sobre las experiencias negativas que ya pasaron. No brindes por lo malo que se fue, sino por lo bueno que viene

Cada día tiene momentos irrepetibles que nos hacen sonreír y sentirnos felices y afortunados. Muchos de esos momentos, se encuentran en las pequeñas cosas que nos rodean