Hablamos mucho de cambios, de mejorar nuestra vida y de conseguir sueños, pero es imposible que eso ocurra si no tenemos en cuenta algo muy importante: Compromiso

Compromiso primero con nosotros mismos porque somos los únicos que podemos producir un cambio y, segundo, con la persona que te está acompañando en caso de haber pedido ayuda

Hay personas que comienzan un proceso terapéutico y piensan que no les funciona pero no puede funcionar si cuando sales de la terapia no comienzas a practicar los nuevos hábitos que te harán cambiar conductas y resultados

La terapia no consiste solamente en hablar, los cambios se producen por un conjunto de muchas cosas: terapias, ejercicios, lectura, conferencias...necesitas rodearte de todo lo que te ayude a producir transformaciones en ti

Si haces exactamente lo de siempre y lo único que cambias es ir a terapia una hora a la semana, los cambios en ti serán mínimos. Una vez que sales de terapia debes poner de tu parte para llevar a cabo lo que has descubierto en ella, todas las herramientas que tu terapeuta te ha propuesto debes aprovecharlas

Pero si no tomas en serio tu compromiso, no llegará el cambio. La terapia es una ayuda, pero el cambio tan solo lo vas a provocar tú, con tu esfuerzo y con tu perseverancia. Habrá personas que te ayuden y te apoyen en tu proceso de cambio, pero no pueden hacer nada por ti si tú no quieres

Por todo esto, si has comenzado o quieres comenzar un proceso para transformar tu vida, mentalízate a que tendrás que poner todo de tu parte y comprométete antes de empezar. Posiblemente aparecerán resistencias porque cambiar hábitos al principio es un trabajo difícil, pero si pones de tu parte, la terapia será totalmente efectiva