ATARAXIA -¿CREES QUE EL AMOR DUELE?-


Antes de responder a estas cuestiones es importante que sepamos qué es el amor, y por supuesto el amor no es dolor, ni decepción, ni resentimiento, ni pérdida de libertad, ni vacio, ni falta de respeto, etc , si sufres por amor es que no es amor. Con esto no queremos decir que en una relación de pareja no puedan haber conflictos o dificultades que en ocasiones nos hagan padecer, pero si esa es la forma habitual de relacionarnos con nuestra pareja e incluso si no la tenemos pero la hemos tenido, quiere decir que se han de hacer cambios para que pueda surgir un estado de paz en una relación

Al principio de una relación de pareja todo parece maravilloso, hemos encontrado la suela a nuestro zapato, la persona que realmente nos complementa, que nos hace feliz, que tiene todo aquello que hemos deseado en alguien para que esté a nuestro lado y con esa sensación decidimos avanzar y comprometernos en una relación de pareja. Damos lo mejor de nosotros mismos para agradar a la otra persona puesto que ya la hemos encontrado y no queremos perderla. Empezamos a analizar de forma inconsciente qué cosas le gustan a la otra persona e intentamos ser diferentes a como normalmente somos para agradar, para que nos valore, para que nos continúe eligiendo a nosotros como pareja

Empezamos a pasar más tiempo con la persona amada, a compartir momentos, a crear proyectos juntos,  y empezamos a ver actitudes que antes no habíamos visto y nos desagradan. Y esas actitudes del otro también hacen salir miedos, dolor, enfados y actitudes en nosotros que desconocíamos, a la misma vez deseas relajarte, sentir paz y dejas de hacer tantas cosas para agradar al otro porque ya te ama tal y como eres y es cansado estar siempre haciendo cosas por otro, queremos recibir, y empezamos a pedir. Pedir, qué? Que me demuestre como me quiere, que lo haga del modo que a mí me gusta, que vista como a mí me gusta porque así me siento más seguro, que tenga una imagen bonita para sentirme más seguro y satisfecho con mi elección, que tenga los mismos gusto que yo porque así podremos disfrutar más de nuestro amor, que me haga reír y divertirme, que me haga sentir que no estoy solo, y un sinfín de reclamaciones. Y la otra persona empieza a sentir que no llega a cumplir con las expectativas que nosotros queremos y a su vez nosotros tampoco cumplimos con las suyas, empieza la sensación de sufrimiento, de no sentirse amada, las discusiones, los malos entendidos, la distancia, la decepción, y todo aquello a lo que tanto teníamos miedo…al abandono, a la soledad, al dolor, al rechazo…empieza a aparecer en esa relación. Y te vuelves a encontrar de nuevo en una relación que repite actitudes que  habías repetido antes en otras relaciones y empiezas a creer que no existe el amor, que no es para ti, que nadie puede amarte, que no sé amar, que es difícil, que no quieres tener más una relación para no sufrir más, que no puedes volver a confiar en nadie más, …y un sinfín de creencias negativas respecto al amor de pareja

Cuando mantenemos una relación afectiva con otra persona aparecen todos nuestros conflictos internos  no resuelto de nuestra infancia. Salen esos niños internos que sintieron que eran abandonados, rechazados, no amados, apartados, traicionados y reaccionamos de la misma forma que lo hacíamos cuando éramos niños, sólo con la diferencia que entoces no teníamos capacidad para cambiar cosas o elegir y ahora sí. Es el caso de María, ella vive una relación de pareja donde no se siente amada, su pareja no se compromete con ella, la rechaza, queda con otras mujeres, tiene miedo de pedirle lo que quiere por miedo a que la deje y se quede sola. Y sigue aguantando todas las actitudes de rechazo que él tiene hacia ella, justificándolo siempre, sintiendo celos, enfado, tristeza y su autoestima cada vez es más baja. Cuando vamos a ver de dónde procede esta actitud de ella de aguantar todo esto, se da cuenta que en su infancia no se sintió amada, su madre tenía muchos problemas con otros hermanos y no podía dedicarle el tiempo que ella necesitaba, ella entendió que no la amaban, y elaboró en su mente la creencia que no merecía el amor, puesto que a los demás su madre si les daba, conformándose siempre con aquello que le daban. Al entender esto pudo darse cuenta que ahora si podía reclamar lo que merecía, que claro que era merecedora del amor y que hasta ahora había estado actuando como esa niña, aceptando las limosnas de amor que le daban. En su caso pudo expresar, y su pareja no quiso darle lo que ella le pedía por lo que decidió romper con la relación, aquello que tanto había temido por su miedo a la soledad. Decidió enfrentar la soledad y darse cuenta que estaba mejor sola, ya no sufría. Y esta comprensión le ha permitido conocer a otra persona que realmente es capaz de amarla y darle lo que merece

Cuando conocemos el origen de nuestras actitudes y emociones, podemos abrirnos a la posibilidad del cambio, a ser dueños de nuestros sentimientos y pensamientos lo que nos lleva a elegir el verdadero amor, el que no trae dolor


Instituto Ataraxia SL
Ronda Barceló 59
Mataró, Barcelona
Tlf.: 93-7990130 / 609-010153
 

 


0 comentarios:

INSTITUTO A.M.I. Reservas 93 758-98-94

TRADUCTOR PAGINA

SUGERENCIAS